jueves, 14 de junio de 2012

Al fin, decidida.

No hizo falta mucho más de un fin de semana para que me convencieran. Fue sorprendente ver cuánta gente de mi entorno directo sueña con ver Nueva York, y que lo prefiere a Los Ángeles, o Canadá. Así que pronto me decidí: Si me concedían la beca, mi destino sería Nueva York.
Las vacaciones de Semana Santa jugaron un papel decisivo en toda esta historia:
Mi ánimo no estaba muy bien, y mis ganas de relacionarme con la gente estaban más bajas que de costumbre. Mi mano derecha para escribir había quedado tan inservible o más que mi cerebro, que lejos de querer pasar las vacaciones estudiando, fantaseaba con un viaje que no parecía que fuera a llegar. Héme delante de la pantalla, hastiada de mi casa y de Valencia, y con Internet al alcance de los dedos. Fue inevitable que gastara más de dos y tres tardes navegando, informándome y buscando alternativas de alojamiento, transporte y curso. Encontré páginas web que -estando especializadas en becas en el extranjero- ofrecían paquetes de curso de inglés más alojamiento por no menos de 1500€ las tres semanas. Por curiosear llamé a varios sitios, y las normas generales no variaron en ninguna de las empresas. A saber:

  • Hay que pagar los servicios contratados, al menos 30 días antes de disfrutarlos.
  • Se proponían para alojarse, residencias de estudiantes con habitación individual o doble, y todas, como es lógico, tenían baño compartido.
  • Los cursos comienzan todos los lunes del año.
  • Las fechas de entrada y salida iban de sábado a sábado. En ningún caso puedes entrar un viernes a una residencia, ni quedarte unos días de más.
  • Ninguna empresa que organice estos viajes se encarga de tu vuelo.
  • Puedes escoger alojamiento y curso, o sólo curso, pero en NINGÚN CASO puedes contratar sólo el alojamiento.
  • En estas empresas no te dan el nombre verdadero de la residencia en la que vas a alojarte, para evitar que contrates por tu cuenta, así que, exceptuando el caso de las residencias YMCA, no encontrarás opiniones de viajeros que no sean becados.
  • Para contratar en estas agencias no tienes que ser becario: cualquiera puede apuntarse y contratar un curso de las horas que quiera, u orientado al sector que le interese. Hay una gran oferta.
  • Si puedes ser becado con la beca Mec, y quieres asegurarte tu plaza en la residencia, puedes pagar un depósito de 200 euros, que será reembolsable en caso de denegación de la beca. 
Todas estas opciones se dan en TODOS los sitios que he visitado, y/o llamado para informarme. Hay residencias que tienen nevera en el dormitorio, y algunas tienen cocina compartida. Otras tantas tienen gimnasio y piscina, y demás cosas que jamás harías si fueras a NY de turismo.
En el próximo post, explicaré porqué decliné en seguida alojarme en una residencia. :D
Tengo ganas de llegar a lo interesante...